viernes, diciembre 03, 2004

La dirección de la música universal, según la versión de las discográficas.
La opinión bienpensante de la mayoría es que la única manera de "salvar" el futuro de la música y de proteger a los artistas, sobre todo a los emergentes y a los que menos recursos tienen, es acabar con el famoso "top-manta" y comprar discos originales.
Siempre he sostenido que hay que comprar discos originales de los artistas que se lo merezcan, para apoyar a esos artistas. No comprar discos piratas ni piratear música es ayudar a mantener las estructuras dinosáuricas de las grandes compañías discográficas, que evidentemente no apoyan a la música, ni lo harán nunca. Si para ganar pasta hay que vender a Raphael, pues se vende a Raphael, mientras que grandes músicos en potencia se pudren tocando en el metro.
Tenemos el ejemplo del grupo británico "Blue", que tiene algo así como 3 o 4 años (¡como mucho!), y que habrá tenido 5 o 6 sencillos de éxito, entre los cuales, que yo recuerde, ha habido al menos 2 o 3 versiones de canciones antiguas: de Elton John, Stevie Wonder... O sea, artistas extraordinariamente prolíficos y grandes compositores de música propia... Y ahora la compañía de discos saca un disco de grandes éxitos. Antes cualquier artista de medio pelo necesitaba al menos diez años de carrera medianamente decente para sacar discos de grandes éxitos... Ahora parece que todo vale. Y se preguntan por qué estamos enganchados al Emule...
No estoy muy inspirado.